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Lars Dolder

El aumento en los precios de la gasolina amenaza a los repartidores que se han convertido en un elemento básico de la pandemia

Ricky Gardner ha trabajado de tiempo completo como repartidor freelance de comida durante casi 10 años, más tiempo del que la mayoría de los grandes servicios han estado presentes en la región de Research Triangle de Carolina del Norte.

Pero el aumento en los precios de la gasolina podría obligarlo a abandonar el sector.

"Pregúntame dentro de una semana y te diré si puedo seguir haciendo esto", dijo. "Creo que vamos a perder a muchos conductores que no pueden permitirse llenar el tanque".

El precio promedio de la gasolina en Carolina del Norte superó los 4 dólares por galón la semana pasada por primera vez en 14 años. La invasión rusa de Ucrania ha perturbado los precios mundiales del petróleo, ya que las cadenas de suministro, paralizadas por la pandemia, se enfrentan a nuevas complicaciones.

Los expertos pronostican que los costos del combustible no se estabilizarán pronto, por lo que los servicios de transporte podrían verse afectados.

"Desgraciadamente, aquí no se termina el hecho de ver que los precios aumentan en la gasolinería", dijo previamente la portavoz de AAA, Tiffany Wright, en un comunicado. "Las sanciones y regulaciones contra Rusia han limitado su capacidad de vender su petróleo en el mercado global, lo que ha intensificado las preocupaciones de suministro global en lo que ya era un mercado ajustado debido a la pandemia".

A lo largo de la ondulante presencia de la pandemia por COVID-19 en los últimos dos años —oscilando entre cierres difíciles y reaperturas optimistas—, los servicios de entrega a domicilio han mantenido a flote muchos pequeños negocios. Empresas como DoorDash, Grubhub, Uber Eats, Postmates y Takeout Central conectaron a los restauradores con sus clientes cuando el intercambio en persona estaba mal visto o prohibido.

Estas operaciones siguen en auge a pesar de los límites de capacidad de los restaurantes, pero el aumento en los precios de la gasolina podría reducir el número de conductores. Gardner —quien trabajó durante ocho años en 919 Dine, en Cary, Carolina del Norte, antes de incorporarse a Takeout Central, con sede en Chapel Hill— afirma que el costo del combustible merma los resultados de los conductores.

"Nos va a perjudicar", dijo. "Si la empresa pagara la gasolina sería otra historia, pero nosotros lo hacemos. Así que sale de mis ingresos".

La conductora de Uber Eats Malaysia Odom compartió el sentimiento de Garner.

"Duele, porque estás usando el dinero que ganas hoy para poner gasolina en tu coche para mañana", dijo.

Varias empresas dijeron que están investigando formas de retener a sus trabajadores, tal vez aumentando las tarifas de entrega y otros costos para anticiparse a la inminente escasez de conductores.

"Con los precios de la gasolina tan altos como están, cada dólar cuenta", dijo Zach Greenberger, jefe de desarrollo de negocios estratégicos y gestión de suministro global en Lyft.

La portavoz de Takeout Central, Sarah Lynn, dijo que la compañía espera asegurar los ingresos de los conductores, incluso si los costos del servicio aumentan.

"Actualmente estamos elaborando un plan a largo plazo para ayudar a que los conductores lidien con la situación mientras los precios de la gasolina están inflados, que puede incluir el aumento temporal de nuestra tarifa de entrega, que siempre va 100 por ciento a los conductores", dijo. "Queremos apoyar de la mejor manera posible a nuestros leales conductores sin cargar a los clientes, así que el primer paso que estamos dando es darle una bonificación inmediata a nuestros conductores constantes, que son los que más están sufriendo el aumento de los precios. Esto viene directamente de Takeout Central...".

Lyft, un servicio de taxi y entrega de comida basado en una aplicación móvil, está promulgando nuevos programas de recompensas para ahorrarle dinero a los conductores.

"Nos preocupa mucho la experiencia de los conductores y hemos tomado medidas concretas para ayudarlos, dado el aumento de los precios de la gasolina", dijo el portavoz de la empresa, C. J. Macklin. "Nuestras inversiones en programas como nuestra asociación GetUpside y la tarjeta de débito de devolución de efectivo Lyft Direct están diseñadas para ahorrarle dinero a los conductores directamente en la gasolinería. Seguiremos explorando otras formas de ayudar a la comunidad de conductores".

El portavoz de Doordash, Eli Scheinholtz, dijo que los "dashers", los repartidores de la app, siempre han ganado el dos por ciento del dinero en efectivo en la gasolinería y pueden acceder a servicios de mantenimiento con descuento para sus vehículos. No indicó si la empresa tenía planes inmediatos de ajustar la compensación de los conductores en respuesta al aumento de los precios del combustible.

"Pero, por mucho que llenemos los tanques, empieza a dificultarse poder ver el beneficio", dijo Gardner, quien rellena su depósito cada dos días en promedio. Antes le costaba unos 150 dólares a la semana. Ese gasto podría casi duplicarse a medida que los precios se acerquen a los 5 dólares por galón.

"Así que no sé: ¿eso significa que la gente va a conseguir sus cosas más con más lentitud porque no hay tantos conductores?", dijo Gardner. "No lo sé, tal vez. Pero sé que es otra forma molesta en la que todo cuesta mucho dinero en estos días".

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